El Impacto del documental «The Last Dance»
Michael Jordan es uno de los deportistas más laureados de todos los tiempos. No sólo por sus logros deportivos sino por el ejemplo de máxima exigencia y competitividad que imprimió a sus años como deportista. En el documental «The Last Dance», el último baile en Español, que hace referencia a como su entrenador, Phil Jackson, denominó esa última temporada en la era de Michael Jordan en los Chicago Bulls, muestra ese lado más cercano y coherente a la vez que competitivo y que sin ninguna duda, nos ha dejado frases de Michale Jordan para hacernos reflexionar.
1. Hay que sudar la camiseta para poder opinar
Esta frase de Michael Jordan, es un claro ejemplo primero de la cultura del esfuerzo para conseguir algo y segundo centrarse en lo que yo controlo, en lo que depende de mí como clave para el éxito.
Mientras practica unos tiros libres en la temporada 97-98. “Acabábamos de ganar un quinto título. Había mucha incertidumbre, y el equipo de gestores empezó a hablar sobre si la franquicia iba a cambiar y se iba a proceder a una reconstrucción. Pensé que no era justo. Nunca le permitiría a alguien que no se ha puesto el uniforme y jugado un día tras otro dictar qué debemos hacer sobre la pista de baloncesto. Así que mi mentalidad apostaba por dejar las polémicas de negocios al margen y centrarnos en el oficio: ‘Démosles una razón para cambiar de opinión”
Cuando llegué a Chicago, aterricé considerándose el punto más bajo de la ‘pirámide’ del equipo. No importaba nada de lo que la gente hubiese estado diciendo sobre mí, aún tenía que ganarme los galones”.
2. El valor de la Lealtad
Aspecto que cuesta mucho verlo en el actual deporte de alto rendimiento y que representa el valor de la Lealtad, podemos estar más o menos de acuerdo, pero el hecho de ser fiel al entrenador que lo acompañó a la cima es una muestra de fidelidad y lealtad sin comparación.
Ante la tentación de apartar al entrenador Phil Jackson del equipo de cara a la temporada del 97, Jordan deja más que clara su postura en una rueda de prensa: “Phil debería ser el entrenador y yo no debería ser puesto en una posición en la que tenga que decidir si quiero jugar para otro entrenador que no sea Phil Jackson. Aunque sea triste, tengo opciones. No elegiré jugar para otro entrenador”.
3. Respeto por la cultura del esfuerzo
Michael Jordan da una rueda de prensa tras haber ganado el quinto campeonato de la NBA con los Bulls. Un periodista le pregunta por los rumores que hay sobre una futura remodelación de la plantilla. A lo que Jordan, intercediendo por sí mismo y por sus compañeros, responde: “Nos hemos ganado el derecho a defender lo que tenemos hasta que lo perdamos [en relación al título de campeones]. Si lo perdemos, entonces es razonable decir ‘vamos a efectuar cambios, vamos a proceder a una reconstrucción’. […] Si lo observas desde un punto de vista de negocio, tienes que tener al menos respeto por las personas que han sentado las bases para que puedas ser una organización rentable”.
“Desde el primer entrenamiento [con los Bulls], mi objetivo era perseguir a quien fuese el líder del equipo por aquel entonces. Pero no pensaba hacerlo con mi voz, porque no tenía voz. No tenía estatus. Tenía que hacerlo con mi forma de jugar”.
4. El equipo por encima del Ego
Michael Jordan, se caracteriza por haber sido un deportista extremadamente exigente y competitivo, pero con la idea bien clara de que, primero era él, el que tenía que jugarse el último tiro porque era el mejor y segundo que sin el equipo que sin sus compañeros no conseguiría nada.
Tras ganar el campeonato de baloncesto de universidades con North Carolina en su primer año como freshman gracias a un triple lanzado por él en los últimos segundos, un periodista le pregunta cómo se sintió cuando vio la pelota entrando en la red y él dice: “Me sentí realmente bien por haber hecho algo que ayudase a todo el equipo a quizá ganar el partido”.
5. El entrenamiento invisible contra las drogas
El llamado entrenamieto invisible, hace referencia a todos aquellos factores que influyen directamente en el rendimiento deportivo y que no tienen nada que ver con el entrenamiento del propio deporte como el descanso, la alimentación, el ocio, etcétera.
En el documental se narra cómo el consumo de drogas era algo habitual en los Bulls pre-Jordan. El mismo jugador relata una experiencia que tuvo en este sentido y que le hizo alejarse por completo de ese camino: “Abrí la puerta [de una habitación de hotel] y prácticamente todo el equipo estaba allí. Vi cosas que no había visto nunca antes en mi vida. Rayas de cocaína, hierba, prostitución. Así que lo primero que dije fue: ‘Mira, me voy de aquí. Porque lo único en lo que puedo pensar es que, si hay una redada aquí ahora mismo, yo soy tan culpable como el resto del mundo que se encuentra en la habitación’. Y, a partir de ese momento, fui un poco por libre”.
El desahogo de la victoria
Tras conseguir el sexto y último anillo de campeón en la temporada 97-98 previo a la retirada momentánea del baloncesto, en la serie de Netflix hay un corte de un momento post partido en el que Michael Jordan rompe a llorar, soltando toda la tensión y la emoción acumulada de las últimas temporadas.